Las repercusiones persistentes del conflicto armado de décadas en Colombia no solo se reflejan en pérdidas físicas y materiales, sino también en profundas heridas emocionales y desigualdades estructurales que afectan a millones de colombianos. A pesar de los esfuerzos del Estado y de la sociedad civil, tanto nacional como internacional, para lograr la paz, aún existen importantes brechas en la reparación y en la protección de los derechos humanos fundamentales. En particular, las mujeres y los niños sufren estigmatización, discriminación y diversas formas de violencia, que afectan directamente sus derechos fundamentales. La compleja red de violencia directa, indirecta, estructural y cultural en Colombia, que perdura desde entonces hasta la fecha, representa un desafío inmenso, que solo puede ser superado mediante una política pública integral, un compromiso de la sociedad civil y apoyo internacional. Este artículo, con la ayuda de una perspectiva de género, examina la situación de las mujeres en relación con sus experiencias de violencia durante el conflicto armado, el impacto de estas experiencias en su vida cotidiana hoy en día, y los pasos necesarios para una política de paz sostenible en Colombia.
Palabras clave: Salud mental, conflicto armado, mujeres, violencia, violaciones de derechos humanos
Autoras: Maria Mauersberger y Valentina Mendez-Höcherl
